La Cámara de la Industria Láctea del Uruguay (CILU) emitió un comunicado este viernes “ante la sorpresiva resolución de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) de iniciar nuevamente medidas de fuerza”.
Esto es, en primer lugar, que la CILU “ha demostrado la mayor voluntad de llegar a un acuerdo” con el sindicato al iniciar la negociación dos meses antes de la convocatoria de la 9.ª ronda de Consejos de Salarios. Los empresarios otorgaron, además, un adelanto del 2 % del ajuste salarial a partir de diciembre de 2021.
En segundo lugar, ante la falta de acuerdo, el Ministerio de Trabajo (MTSS) elaboró una propuesta que implica: la recuperación salarial en 24 meses de un 4,82 % del período puente de la pandemia; la realización de ajustes semestrales y correctivos anuales por IPC por un plazo de cuatro años; una partida especial de $ 2.000 mensuales durante el ultimo año del convenio (2025); una cláusula de paz que supone la no realización de reivindicaciones salariales durante la vigencia del convenio, cláusula vigente en todos los convenios y que es la “consecuencia natural” de la existencia de un acuerdo, y que las empresas se comprometen a revisar —junto a la organización sindical— “si amerita realizar un ajuste salarial”, según el comunicado.
La CILU, “en una decisión difícil dada el contexto y priorizando la paz para trabajar” frente a un “futuro desafiante”, aceptó la propuesta, notificó.
No obstante, reclamó que la FTIL “no quiere paz”, sino que “presiona con paros y otras medidas sindicales, amenaza con trancar las exportaciones y “pretende además imponer reiteradamente por la fuerza infundados reclamos”, pese a las “privilegiadas” condiciones laborales, finaliza la misiva.
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