Marisa Lindner, junto al directorio, tomó parte de la presentación que el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay llevó a cabo en el centro del país, el jueves 7 de junio, a la hora 10:00.
Tal como lo había anunciado la Dirección Departamental de Administración y Apoyo, Proyectos y Servicios (Proceso de Readecuación Institucional), se habló de la nueva estructura institucional y de los Fondos Iniciativas Locales (Programa Propia).
Lindner subrayó la necesidad de que “los niños tengan un lugar pensado para ellos, en el espacio público, porque muchas veces las plazas o los lugares donde circulan los niños están realizados con una mirada adulta”.
En lo que toca a lo institucional, el directorio de INAU, entre ellos el duraznense Dardo Rodríguez, informó a las instituciones con las que trabaja a diario, sobre la nueva estructura departamental, resultado de un proceso de transformación que empezó hace algunos años.
“El objetivo es -dijo Rodrìguez- adecuar una institución que tiene 80 años, que nació con el Código de 1934 y que debe adaptarse a las nuevas necesidades de las familias”.
Sobre Durazno, Rodríguez aclaró que el Lic. Alejandro Castro seguirá al frente del INAU, pero se le sumarán nuevos roles, lo que permitirá direcciones departamentales más en contacto con el contexto y con el resto de las instituciones del Estado, dado que no se pueden reducir las garantías a los niños sólo al INAU, la protección no se agota en el instituto.
Se crea, una dirección de programas y proyectos que en este caso estará a cargo de la psicóloga Cecile Porta, que va a ser la encargada del seguimiento de cada uno de los proyectos que tiene el departamento y que son más de 40. Y una dirección administrativa que va a acompañar todos los procesos de gestión y de apoyo de estos programas, que es Matilde Ceva.
La actividad tuvo lugar en el local de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, calle Lavalleja y Rivera, donde también se realizó la jornada del Sistema de Cuidados.
PROPIA (Programa de participación infantil y adolescente): apunta a la promoción del derecho a la participación de niños, niñas y adolescentes. Se trata de un fondo concursable que desde hace un par de años beneficia a chicos activos, quienes junto a docentes, formulan diversas propuestas.