Como cada mes, el ministro Jorge Basso se reunió este viernes 9 de noviembre -2018- con los directores departamentales de salud, esta vez en la ciudad de Durazno. Durante la jornada visitaron experiencias de buenas prácticas: la unidad de atención temprana de niños de 0 a 6 años con vulnerabilidad, a cargo de un equipo especializado del sector público que apoyó a 300 menores en una década, y una policlínica de atención de casos de violencia de género del prestador privado.
Entre las acciones del Gobierno de Cercanía, el ministro de Salud Pública, Jorge Basso, y parte de su equipo, incluido el subsecretario de la cartera, Jorge Quian, viajaron el viernes al departamento de Durazno para mantener las tradicionales reuniones mensuales con los directores departamentales de Salud. En esta nueva modalidad, los encuentros se concretan en diferentes departamentos.
En cada viaje, las autoridades visitan centros de salud. En este caso, se trasladaron a una policlínica pública donde funciona una unidad de atención temprana a recién nacidos en riesgo. Allí se efectúan tratamientos respecto a desarrollo neurológico, neuromuscular, psicológico o social, así como apoyo y seguimiento de un equipo interdisciplinario. En una década fueron asistidos más de 300 niños y actualmente se realiza el seguimiento de 150.
El ministro destacó la tarea del personal y las mejoras de infraestructura de esa dependenca de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) considerada de referencia para Durazno y otros seis departamentos.
Las autoridades también concurrieron a una policlínica del prestador privado (Camedur) que atiende situaciones de violencia basa en género y generaciones a través de un equipo interdisciplinario que actúa de forma integral con médicos, enfermeros, psicólogos y asistentes sociales. Este tema es considerado de alta prioridad para el ministerio por su sensibilidad.
Entrevistado por medios informativos en Durazno y acompañado por la directora departamental, Ana Tomasco, el ministro consideró a estas dos iniciativas como elementos del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS) dignos de replicar. Además, resaltó la importancia de los sistemas de información con historia clínica electrónica, los sistemas de intercomunicación entre prestadores y el trabajo en red y entre los distintos niveles de atención.
En cuanto al funcionamiento global del sistema en Durazno, dijo que el ministerio trabaja con dos prestadores: uno público y otro privado, de acuerdo con indicadores que permiten realizar un seguimiento. La secretaría de Estado avanza en la generación de estímulos para esos servicios, a fin de que logren mejores resultados con los recursos existentes.
Consultado sobre las esperas para acceder a consultas con especialistas, Basso consideró que se debe evitar recurrir a estos profesionales cuando las situaciones puedan ser resueltas por equipos del primer nivel de atención. Además, indicó que se conformó la estructura de cargos de alta dedicación para que más profesionales, con más horas asignadas, se radiquen en diferentes departamentos.
En cuanto al acceso a servicios en zonas rurales, el ministro insistió con la complementación. En este último caso, en la jornada, el equipo del ministerio, junto con la Intendencia de Durazno en la persona de su máximo jerarca, Lic. Carmelo Vidalín, y los prestadores radicados en el departamento, avanzarán en la concreción de un acuerdo que facilite el desarrollo de esta modalidad.
