El empresario asistió económicamente a la propietaria de un campo, que ahora denuncia estafa y amenazas para expulsarla del terreno. La información fue publicada por el portal de Subrayado.
El empresario Óscar Dourado enfrenta dos nuevas denuncias penales por estafa y apropiación indebida, y por violencia privada y amenazas, que fueron presentadas ante la justicia de Durazno. La denunciante señala que Dourado se apropió de sus campos y que la amenazó para que se fuera de las tierras y desistiera en reclamar sus bienes.
Verónica Artola es titular de un establecimiento rural en la quinta sección de Durazno, ubicado a unos 15 kilómetros del poblado San Jorge.
La mujer sostiene que apeló a Dourado en el año 2013 para que la asistiera financieramente y poder levantar así una hipoteca que tenía por una suma impagable para ella.
Desde entonces -según su denuncia- comenzaron las diferencias con el empresario, las que se agudizaron con el paso del tiempo.
En la denuncia la mujer relata que Dourado la obligó en 2016 a arrendarle parte de su campo, que destina para la cría de ganado.
Artola dice que Dourado no le ha pagado nada por concepto de renta y que tampoco le ha descontado dinero a cuenta de lo adeudado desde 2013.
La mujer dice que su acreedor no le reconoce pago alguno, lo que ha incrementado la deuda inicial y que las presiones para sacarla del campo han ido en aumento, directa e indirectamente.
DENUNCIAS
La primera de las denuncias por estafa fue presentada el 8 de octubre del 2018 ante la Fiscalía de Durazno. La investigación recayó en el doctor Alejandro Sastre.
La segunda denuncia data del 13 de noviembre también del año pasado, en este caso por violencia privada y amenazas contra Dourado.
La abogada denunciante es Fabiana Gonzalez Raggio, quien ratificó que las denuncias están en curso y las actuaciones se retomarán luego de la feria judicial.
Subrayado se contactó con Dourado para que brindara su versión de los hechos. El empresario prefirió no realizar comentarios en virtud de que hay un proceso judicial en curso y dijo que no quería “entorpecer el trabajo de la justicia”. Una vez finalizado el proceso y si hay mérito, realizará los descargos pertinentes.
Un empleado de Óscar Dourado que trabaja en el campo objeto del litigio fue procesado por la justicia tras constatarse que agredió a la denunciante durante una discusión por la tenencia de las tierras.
Pese a las diferencias con Dourado, la denunciante no abandonó el campo y está radicada en una parte del casco de la estancia.
A fines de noviembre, la mujer fue víctima de un episodio violento con un empleado de Dourado que terminó en la formalización del hombre ante la justicia y medidas de restricción de acercamiento al establecimiento.
El hecho sucedió el 24 de noviembre, cuando la denunciante sacaba fotos a las puertas de la cocina y el cuarto de los peones que estaban con candado. La mujer lo increpó por cerrar esas puertas cuando ella era la dueña.
El hombre la golpeó con rebenques y le provocó varias lesiones.
