En horas de la tarde del día 18 de julio de 2018 se tomó conocimiento en la Brigada Departamental Antidroga, por parte de personal de la Unidad N.o 18 del Instituto Nacional de Rehabilitación, que una mujer -31 años de edad- había enviado una encomienda destinada a un recluso y al ser registrada contenía sustancia estupefaciente.
Ante la situación, personal de la Brigada realizó el procedimiento de rigor: procedió a la detención de la remitente, puso el hecho en conocimiento de fiscalía y a partir de allí se instruyeron los pasos a seguir.
Finalmente, este jueves 23 de mayo -2019- en audiencia celebrada en el juzgado local, la magistrada dispuso la formalización de la investigación contra la mujer, “como autora penalmente responsable de un delito de suministro de sustancia estupefaciente, especialmente agravado, en grado de tentativa”.
Además de la condena de 16 meses de prisión (según datos divulgados por Jefatura de Policía) la Justicia determinó que serán de cargo de la procesada los gastos accesorios de rigor.
En esta instancia, las partes acordaron como forma de cumplimiento, la totalidad de la pena en el régimen de libertad vigilada, conforme a lo previsto en el artículo 2, de la ley 19.446.
A la femenina le fue impuesta la obligación de residir en un lugar determinado donde sea posible la supervisión por parte de la Oficina de Supervisión de Libertad Asistida (OSLA). Así como la sujeción a la orientación y vigilancia permanentes de la referida oficina.
Por otra parte, la condenada estará obligada a presentarse una vez por semana en la Comisaría correspondiente al domicilio fijado. Además, se le exigió el ejercicio de una profesión, oficio, empleo, arte, industria y comercio, bajo las modalidades que se determinen en el plan de intervención.
