Interior plantea incorporar un cuarto helicóptero a Unidad Aérea para incrementar control y seguridad
El Ministerio del Interior tiene como objetivo sumar un helicóptero a la Unidad Aérea de la Policía Nacional, que se sumará a la flota de tres aeronaves para reforzar el control y la seguridad.
Dispone de una capacidad de cinco ocupantes y autonomía de vuelo de más de cinco horas, por lo que brinda la ventaja de volar hacia el punto más alejado del país y retornar sin necesidad de reabastecer combustible.
En el capítulo del Ministerio del Interior en la última Rendición de Cuentas se señala que el cuarto helicóptero es marca Robinson, modelo 66 Turbine, de Estados Unidos, el mismo fabricante de los tres anteriores. Esta aeronave será la primera propulsada con un motor a turbina de la flota de la Policía.
Entre sus características se destacan su capacidad para cinco ocupantes, incluido el piloto, y una autonomía de vuelo de más de cinco horas, lo que le permitirá volar dentro del territorio nacional hacia el punto más alejado de la capital y regresar sin necesidad de reabastecer combustible. En cuanto a su equipamiento extra, tiene la posibilidad de instalación de una cámara, un reflector de alta potencia y un gancho para el izado de cargas externas.
Con respecto a las ventajas que supondrá su operación para la unidad oficial, se distingue la facilidad de entrenamiento de los pilotos en la aeronave, por tratarse de un aparato de similares características a los que ya se operan, así como mayor confiabilidad de su planta motriz, por contar con un motor a turbina, lo que posibilitara operaciones nocturnas y sobre zonas céntricas de la ciudad con márgenes de seguridad más amplios.
Actualmente, los tres helicópteros de que dispone la Unidad Aérea de la Policía Nacional son Robinson 44 Raven II, similares a los que utiliza la Policía de Los Ángeles, que pueden desarrollar una velocidad de 115 nudos (212 kilómetros por hora). Uno de esos aparatos cuenta con cámara térmica Flir Ultra 8000, con visión nocturna, que permite la detección de objetivos por calor corporal. Para la unidad con máxima tecnología de contralor, el ministerio invirtió un millón de dólares, mientras que las otras dos costaron 500.000 cada una.
Obras y adquisiciones
Otro objetivo de la cartera ministerial es tramitar una licitación para sistema de radares y cámaras para las rutas nacionales que ayudarán al cumplimento de la normativa vehicular en las rutas y también serán un elemento más para la seguridad.
También apunta a contar con un nuevo edificio para la Dirección Nacional de Policía Científica, en el que albergará a los departamentos de Inspección Pericial, Balística Forense, Fotografía, Planimetría, Informática Forense, Laboratorio Químico y Accidentología, así como la Escuela de Criminalística.
A su vez, busca incorporar un sistema de reconocimiento facial integrado a los sistemas de Identificación Civil, que propenderán a brindar mayor información en las puertas de entrada de los espectáculos públicos u otros escenarios, a fin de prevenir acciones delictivas o violentas, así como la resolución de hechos delictivos, en el que existan imágenes de utilidad para la identificación.