Existe como mínimo tres actividades que concitan el interés de la mayoría de los uruguayos: el fútbol, la política y el carnaval. El disfrute de las tres, puede motivar grandes alegrías, pero también lágrimas.
La actividad del carnaval viene desde el fondo de la historia de los pueblos, y según los analistas, en Uruguay, la primera actividad de carnaval de manera oficial, se cumplió el 16 de febrero de 1874 en Montevideo.
En Durazno existe una muy rica historia de actividades de carnaval, surgiendo personajes muy particulares, de una fiesta estrechamente vinculada con el pueblo, que ha experimentado grandes cambios. Tenemos hoy el privilegio de ser la “Capital del Interior de las Llamadas”, un fenómeno que adquirió gran desarrollo y gran prestigio, que le otorgó trascendencia nacional a nuestro departamento.
No obstante los cambios, lo que no ha variado, es la vigencia en el recuerdo, de figuras que dejaron profundas huellas en el alma del pueblo, de lo que algunos dicen fue un tiempo mejor. Haremos referencia en esta nota, a una duraznense, que si bien no tuvo directa participación de la Fiesta de Momo en nuestra ciudad, su actividad tuvo trascendencia nacional e incluso fuera del país.
Nos referimos a Lágrima Ríos. Su verdadero nombre era: Lida Melba Benavídez Tabárez, conocida como “La Dama del Candombe” o “La Perla Negra del Tango”. Tuvo el privilegio de ser la primera cantora profesional morena en interpretar tangos. Los especialistas en el tema afirmaban, que su voz, representaba la más noble esencia del cantón mestizo y negro.
Lágrima nació en nuestra ciudad, el 26 de setiembre de 1924, en una finca ubicada en la hoy calle Baltasar Brum. Su madre tenía 15 años cuando la dio a luz y su abuela que procedía de un grupo de esclavos fugados de Brasil, ayudo en su crianza, enfrentando graves dificultades económicas. Se mudaron a Montevideo en búsqueda de nuevos horizontes, su abuela le enseñaba pasos de bailes a grupos de negros, en técnicas tales como: ”Escobilleros” “Mama Vieja “y de toques de tamboril. Lágrima recogió esta experiencia y muy joven, acompañó un guitarrista, logrando gran interés por la potencia y tono de su voz, al punto de que el conocido Maestro Alberto Mastra, la integró a su trío, ingresando al escenario profesional .
Compartió varios grupos, con presentaciones en Madrid, Londres y París, siendo la primera cantora uruguaya que actuó en La Sorbona. Grabó muchos discos, actuando incluso en algunas películas relacionadas con el tango y el afro.
Esta ilustre hija de Durazno, nacida en ese barrio crisol de muchos valores, como es el “Puerto de los Barriles” ,decía en una nota periodística :” Soy una mujer a quien Dios le quitó muchas cosas, pero también le dio una garganta, que a través de los años fue manteniendo su pureza frente al público y recibir el aplauso. No solo de mi país sino también fuera de él. Soy una mujer agradecida a Dios, pero estrella no”.
Sería una buena iniciativa contar en Durazno con un “Museo del Carnaval”, para tributar el homenaje a queridos personajes, grupos y artistas de tablado, que dejaron su grata huella en la historia del carnaval de Durazno. Espacio de privilegio ocupará Lágrima Ríos.