Más de 50 comedores del Instituto Nacional de Alimentación (INDA), ubicados en 17 departamentos, recibieron aportes del Instituto Nacional de Carnes (INAC), lo que benefició a unas 17.000 personas por día.
Esta política, dirigida a la población más vulnerable durante la emergencia sanitaria de COVID-19, será evaluada en diciembre, para una posible prórroga en 2021, dijo el presidente del organismo, Fernando Mattos.
Al inicio de la emergencia sanitaria, decretada el 13 de marzo, la junta directiva del INAC resolvió el apoyo al INDA con un millón de dólares, para la adquisición de cortes vacunos y su distribución en los comedores, en forma coordinada con los Gobiernos departamentales y los Centros Coordinadores Departamentales de Emergencias (Cecoed).
Las primeras entregas implicaron la distribución de unos 8.000 kilogramos semanales de aguja y paleta sin hueso, de origen nacional. Luego fueron añadidos otros cortes vacunos. El sector avícola contribuyó con la faena de gallinas ponedoras en fase final productiva, que fueron añadidas a las compras del INAC en el mercado interno.
“Entendemos que ha sido muy importante para atender la demanda incremental que generó la pandemia en los comedores del INDA”, subrayó Mattos en diálogo con Comunicación Presidencial.
La decisión se tomó para respaldar a los más vulnerables durante este año. El presidente del INAC adelantó que el instituto evaluará la extensión de este aporte para 2021, en caso de que se prorrogue la emergencia sanitaria.
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