La iniciativa es impulsada por el edil de Cabildo Abierto, Guillermo Gurbindo, quien recordó que se cumplen 50 años del atroz asesinato del peón uruguayo en una tatucera. Pidió que la idea sea elevada para su consideración a comisiones de la Junta Departamental y a la Intendencia de Durazno. El planteamiento lo realizó el pasado viernes 21 de mayo en los Previos del legislativo.
Planteamiento
“Como ustedes saben este 30 de abril se celebró el Día del Peón Rural. Quizás no debe haber figura más representativa de nuestro interior rural que el peón, sin desmerecer a tantas otras que también cumplen una importante labor en nuestro interior.
Pero ante el peso de la historia esas figuras deben ceder en alguna medida su lugar porque el peón, el peón es emblemático, heredero del gaucho y asociado a las luchas de nuestro máximo héroe primero y a las patriadas, después. Figura que encaja perfecta como parte de aquella trilogía que nos definía el historiador y que nos enseñaban en la escuela que hacía referencia a la Banda Oriental: pradera, frontera, y puerto, pero que eran rasgos distintivos que aún en alguna medida permanecen; símbolo de esfuerzo, sacrificio, pobreza, humildad y por qué no de olvido, han sido entre otras las palabras con las cuales generalmente lo definimos.
Y es por eso que quiero traer una historia de olvido aquí. Una mañana de fines de diciembre del 71 un peón rural como tantos, buscando el caballo perdido de un vecino, tuvo la poca fortuna de toparse con una columna terrorista que salía de una tatucera (era como se les llamaba los escondites rurales del movimiento tupamaro). Rápidamente secuestrado, luego de algunos días se decide su ejecución por medio de una inyección de pentotal que suministró un joven estudiante de medicina, el actual doctor Ismael Vasini.
Su nombre era Pascasio Báez, tenía 45 años, si bien se sabe que era votante del Partido Nacional no militaba en política. Estaba casado, su esposa murió a los pocos días y tenía varios hijos pequeños.
Por suerte ese olvido del que hablaba está dejando de ser tal, ya que el año pasado un diputado del Partido Nacional, el señor Pablo Viana, presentó un proyecto donde solicitaba que el 21 de diciembre sea denominado Día del Trabajo Rural, homenaje a Pascasio Báez.
A su vez, en línea con lo que estoy diciendo, la Junta de Soriano también a instancia de un edil del Partido Nacional decidió honrar una parte de la hermosa rambla que hay en la ciudad de Mercedes con su nombre.
Este 21 de diciembre se cumplen 50 años de su atroz asesinato y posterior desaparición, vaya a saberse por qué extraña razón nunca recordado por ninguna de las organizaciones que se ocupan del tema. Y es en base al rescate del olvido y con fundamento en lo expresado, así como también de honra a todos los peones rurales y en rechazo a la violación de los derechos humanos, que queremos plantear que el hermoso espacio que tenemos en nuestra ciudad, donde se encuentra el Monumento al Peón Rural, obra del ex intendente, Dr. Raúl Iturria, sea denominado “Espacio Peón Pascasio Báez”, en recuerdo de su memoria y como testigo de hechos como el que acabo de relatar para que no sucedan nunca más.
Solicitamos, señor presidente, que dicha iniciativa sea pasada a las comisiones de Educación y Cultura, de Obras y al Ejecutivo Departamental”.
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