El presidente de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Robert Silva, informó que, a partir de este año, se aislará a un grupo y se indicará el hisopado solo cuando existan dos o más casos confirmados de COVID-19. Esta y otras determinaciones fueron tomadas en conjunto con el Ministerio de Salud Pública (MSP) y fomentan una evolución hacia la presencialidad, sostuvo el jerarca.
En el marco del trabajo coordinado que el organismo desarrolla con el MSP, el titular de la ANEP explicó que, desde 2022, no será necesario aislar a una clase entera en caso de que aparezca un caso de COVID-19, sea en un docente o en un alumno.
Sin embargo, si se detectan dos o más casos en un mismo grupo, se considerará un brote y se procederá a aislar a todos sus integrantes, así como a realizarles el test correspondiente. Si, por el contrario, surgen dos o más casos en diferentes grupos, se aplicará el mismo criterio que en el primer escenario, o sea, no se suspenderá la presencialidad.
Asimismo, resaltó la importancia de controlar la aparición de síntomas en cada persona, el uso de tapabocas, la higiene y la ventilación de las aulas. Explicó que, en lo referente a las actividades de los centros de enseñanza, no habrá distinción entre los niños que estén vacunados y los que no, y que los menores que se enfermen deberán obtener un alta médica de su prestador de salud.
Además, recordó que se sugiere a los docentes contar con el esquema de vacunación completo y que a la fecha son más de 80% los educadores inoculados. También reveló que alrededor de un 60% de los menores de entre 5 y 11 años están vacunados o agendados, lo que permitirá llegar al comienzo de clases con un “muy buen escenario”.
Silva señaló la vacunación como elemento clave en la evolución hacia la presencialidad en los centros educativos. Comentó que Uruguay se encuentra entre los primeros países del mundo que priorizó la vacunación de docentes y funcionarios, además de ser de los primeros en inocular a menores de 18 años, lo que consideró fundamental.