Publicaciones en redes sociales ponen en el tapete el estado de salud de la osa EVA, uno de los tantos animales que el zoológico de Salto repartió entre bioparques del Uruguay tras cerrar sus puertas; desde hace un año y medio (17.04.2021) está en el Bioparque “Washington Rodríguez Piquinela” de Durazno.
Los comentarios partieron de redbicheraoficialuruguay (en Instagram) y una usuaria de Facebook (litoraleña), a los que se han venido sumando otras opiniones en diferentes direcciones: están los que critican la salud y las condiciones de vida de la osa y los que no ven nada de qué preocuparse. En ambas posturas DURAZNO DIGITAL fue etiquetado a sus efectos.Las personas que están mostrando su preocupación en redes sociales han expresado su voluntad de confluir en Durazno a efectos de realizar una manifestación junto a la puerta del Bioparque, ubicado en Ruta 5 y Carlos María de Pena. Desde las redes crearon el hashtag #LiberenAEva y están juntando firmas para sensibilizar a las autoridades. Entienden que EVA “no es tratada de su estereotipia ni ningún aspecto de su salud, porque no existe infraestructura para atender la salud de animales de gran porte”.
Según consultas realizadas por el Portal de Noticias hasta ahora la concentración no se ha concretado y la actividad en el popular paseo turístico es totalmente normal.
Por su parte, el director General de Servicios de la Intendencia, Mauricio Hernández, que fue quien trabajó cuando se hizo el traslado del animal a Durazno y conoce bien a EVA, compartió dos datos que aportan al caso.
Primero, para dar tranquilidad a quienes están inquietos por comentarios que circulan en redes: la semana entrante el INBA (Instituto Nacional de Bienestar Animal) realizará un chequeo del estado de salud de EVA. El reporte será dado a conocer por parte de las autoridades municipales seguramente en el marco de una conferencia de prensa.
Segundo, para el jerarca, que ha estado en consulta con la veterinaria a cargo del bioparque, la osa ronda los 21 años de edad, está en una etapa de cambio de pelaje. Anda sin dificultades, se acuesta y descansa como de costumbre y es siempre atendida. No obstante, para tener otra opinión la IDD procurará el asesoramiento del INBA.
Los múltiples documentos subidos por fuentes confiables a internet indican que el promedio de vida del oso pardo es de 20 a 25 años en libertad y en las condiciones idóneas para su supervivencia.
Si su vida transcurre en cautiverio el promedio es mayor y puede llegar a superar los 30 años (podría alcanzar los 40); depende mucho de la alimentación. Ellos hibernan por lo que en los períodos anteriores necesitan aumentar mucho para poder aguantar todo el invierno, ya que durante ese estado pueden llegar a perder la mitad de su peso.
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