Vecinos de La Paloma, Durazno, han escrito una carta al Ministro José Luis Falero, que fue leída por la curul nacionalista Anabel Fuentes en la Junta de Durazno, el jueves 13 de abril durante la Media Hora Previa. Solicitan que el nuevo puente que conecta Durazno y Tacuarembó en la picada de Oribe, lleve el nombre del Ingeniero Agrónomo Eduardo Urioste, a quien consideran un referente del trabajo ganadero y un líder agropecuario comprometido con el desarrollo del sector en Uruguay.
Transcripción duraznodigital
"Gracias presidente. Voy a dar una lectura a una carta que he recibido por vecinos de La Paloma, dirigida al ministro José Luis Falero, que dice lo siguiente:
De nuestra mayor consideración: nos dirigimos a Usted para expresarle nuestra intención de que el puente que une Tacuarembó y Durazno, en picada de Oribe, recuerde a nuestro vecino y amigo: el Ingeniero Agrónomo Eduardo Urioste y lleve su nombre.
Eduardo Urioste estuvo radicado en La Paloma de Durazno desde su nacimiento. La familia adquirió campos que pertenecieron a la familia Oribe, sobre el margen del sur del Río Negro, en el camino que iba a Paso Libre de 1904, apenas finalizada la revolución.
Joven estudioso, de personalidad extrovertida, con gran calidad humana, se recibió de Ingeniero Agrónomo y dedicó su vida a la producción agropecuaria en el establecimiento familiar San Eduardo, ubicado a 8 km de la picada de Oribe, donde hoy se está por inaugurar el puente que conecta Durazno - Tacuarembó.
Eduardo Uriote ha sido siempre un referente del trabajo ganadero, y su genética Hereford, Corriedale y Angus, fueron reconocidas.
Hombre campero, conocedor y muy técnico; también gran luchador, trabajador, creador y optimista. Fue líder y referente zonal y muy querido por todos. Muchos vecinos y amigos acudían a su consejo de hombre sano e íntegro que era.
Ingresó a la Junta Directiva de la Sociedad Rural en 1986, fue director de exposiciones de la Expo Prado por varios períodos y presidente de 1992 a 1994.
Durante su presidencia recorrió el país recogiendo necesidades e inquietudes de todos los ámbitos; impulsó y apoyó las políticas de liberación y de desregularización del sector agropecuario que hasta hoy perduran. Creía firmemente en el agro y en que se debía mejorar la productividad. Fue un presidente positivo y con gran sensibilidad hacia toda la producción.
Fue delegado de la ARU en el Plan Agropecuario e INIA, donde volcó toda su experiencia y enfoque práctico. Desde el gremialismo fue gran impulsor y coautor de transformaciones de políticas agropecuarias para el desarrollo agroindustrial del país; fue un gremialista comprometido, realista, práctico, franco y un gran amigo.
Intercedió muchas veces por el buen funcionamiento de la balsa ante el Ministerio de Transporte y Obras Públicas y ante la Intendencia de Durazno, por la importancia de la conexión entre los dos departamentos. Además, participó del proyecto de mejoramiento de la balsa con el apoyo del presidente de UTE, para llevar energía eléctrica a paso Oribe.
Comprometió autoridades a realizar extensión en los horarios de servicio, así como las mejoras, como contar con rampas de hormigón y teléfono en dicha balsa.
