En la madrugada del viernes 7 de julio, la tranquilidad en la Ruta 5 se vio interrumpida cuando personal de la Comisaría 2da. realizaba controles de rutina y detuvo la marcha de un vehículo con tres ocupantes. Lo que parecía ser un simple procedimiento de inspección ocular se convirtió en un descubrimiento para las autoridades.
Durante la inspección del rodado, los agentes policiales se percataron de la presencia de una sustancia vegetal, un arma de fuego y carne ovina. Ante esta situación, solicitaron la intervención de la Policía Científica y la Brigada Departamental de Seguridad Rural para llevar a cabo las diligencias correspondientes.Como resultado -según reveló la Jefatura de Policía- las fuerzas del orden decomisaron la sustancia vegetal, la carne ovina, un revólver calibre 22 sin numeración visible, cuatro cartuchos y dos vainas calibre 22.
La actuación fue informada de inmediato a la Fiscalía competente. Tras los procesos de rigor, se llevó a cabo una audiencia que culminó con la condena de uno de los implicados.
El individuo involucrado es un joven de 19 años de edad, quien fue encontrado penalmente responsable de la autoría de un delito de tráfico interno de arma y un delito de porte de arma con signos de identificación alterada.
La sentencia impuesta dictamina una pena de 6 meses de prisión, la cual deberá cumplirse bajo el régimen de Libertad a Prueba. Esta modalidad implica que el condenado deberá respetar ciertas condiciones y mantener un buen comportamiento durante el período de prueba. IR A PORTADA
