Durante la sesión del jueves 25 de abril en la Junta Departamental de Durazno, el edil Javier Niche, levantó la voz para expresar su preocupación por el deplorable estado de abandono en el que se encuentra el pasaje peatonal subterráneo ubicado en la intersección de la Ruta 5 y la calle Rubino.
El reclamo, que resurge un año después de que fuera presentado por su compañera Ana Paula Gutiérrez, se centra en la sustracción de la instalación eléctrica y de toda la tecnología que originalmente equipaba el pasaje. Niche lamentó la falta de mantenimiento y la inadecuada higiene que caracterizan al lugar. Señaló que no se está utilizando para el fin para el que fue construido."Es evidente que esta obra pública de importancia no ha cumplido con las expectativas de la población de Durazno", afirmó. Sin embargo, destacó la necesidad de no dejar caer la obra en el olvido y propuso una colaboración entre las instituciones pertinentes, incluyendo al Ministerio de Transporte y Obras Públicas y a la Intendencia de Durazno.
Solicitó específicamente al Departamento de Obras y Servicios de la Intendencia que se realicen tareas de mantenimiento para garantizar el uso efectivo del pasaje peatonal, en principio pensada como vía rápida de acceso a la calle del hospital Penza. "Es fundamental que mantengamos este espacio limpio y funcional para el beneficio de los vecinos", enfatizó.
Niche concluyó su intervención pidiendo que sus palabras sean transmitidas al Ministerio de Transporte de Obras Públicas, a la Comisión de Obras de la Junta Departamental y a la Intendencia Departamental, así como al Departamento de Obras y Servicio de la Intendencia, con la esperanza de que se tomen medidas para mejorar la situación del pasaje peatonal subterráneo en Durazno.