Inaugurada el 28 de abril de 1924, en Paraguay, en el mismo predio donde José Gervasio Artigas vivió sus últimos días, la escuela es, actualmente, la única del sistema educativo uruguayo que funciona fuera de fronteras. El ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira, señaló a Comunicación Presidencial que el centro está cargado de simbolismo artiguista, y se ubica “en un territorio que forma parte de una sola patria”.
Acompañaron a Da Silveira, en la celebración, la presidenta de la Administración Nacional de Educación Pública, Virginia Cáceres; la directora general de Educación Inicial y Primaria, Olga de las Heras; la directora de la escuela, María José Volpe, entre otras autoridades de la educación, además del intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, y representantes del regimiento Blandengues de Artigas.Por Paraguay, estuvo presente el ministro de Educación y Ciencias, Luis Ramírez; el viceministro de Culto, David Velázquez, y la ministra de Cultura, Adriana Ortiz, entre otras personalidades del Gobierno de dicho país.
Da Silveira transmitió el saludo del presidente de la República al pueblo paraguayo, valoró la hermandad que une a ambas naciones y destacó el simbolismo artiguista que la escuela representa. El prócer uruguayo vivió unos 30 años en ese país y estuvo muy involucrado con la comunidad, dijo. “Al igual que Artigas, no nos sentimos en el extranjero, sino en un territorio que forma parte de una sola patria”, agregó a Comunicación Presidencial.
En el mismo sentido, tanto Cáceres como De las Heras señalaron que la presencia de una escuela uruguaya en territorio guaraní reafirma el sentido de unidad entre los dos países. En ella, niños y maestros comparten una misma propuesta educativa, así como lazos culturales. La escuela se creó, no solo como centro educativo, sino como embajadora de cultura y confraternidad, señalaron.
Las autoridades paraguayas destacaron que el centenario de la escuela Artigas forma parte de un momento histórico. Ramírez dijo que este centro une a dos países y representa un ejemplo para el mundo. En tanto, Velázquez hizo un repaso histórico, destacó los hitos de la relación entre Uruguay y Paraguay, y valoró la figura de Artigas.
Una escuela uruguaya, en Paraguay
Se ubica en el barrio Santísima Trinidad de Asunción, en el predio donde el prócer vivió sus últimos días. “Es una escuela pública uruguaya, como si la hubiésemos sacado de Uruguay y la hubiéramos puesto en Paraguay”, explicó Da Silveira. Las maestras son uruguayas y los programas también. Inclusive, los alumnos usan túnica y moña, algo que no se acostumbra en ese país, ilustró.
El centro cuenta con seis grupos, de primero a sexto año, y dos de educación inicial correspondientes a los niveles 4 y 5, explicó De las Heras. Allí trabajan ocho maestras y una directora. Todas ellas son uruguayas y accedieron a los cargos a través de un llamado. Al igual que en los centros ubicados en el territorio nacional, la inspección técnica de Primaria ejerce su supervisión. Además, cuenta con profesores de guaraní y educación física.
Asisten unos 250 alumnos y se sigue el modelo pedagógico de Uruguay en base a los preceptos varelianos: laicidad, gratuidad y obligatoriedad, aseguró Cáceres. Desde 2023 implementa el proceso de transformación educativa y también participa de Ceibal, ya que los alumnos acceden a programas como Ceibal en Inglés, Pensamiento Computacional o Artistas en el Aula.
De todas formas, el proceso de enseñanza presenta algunas particularidades, como el aprendizaje de guaraní y la incorporación de algunos contenidos que no están en la currícula uruguaya.
La conmemoración de los 100 años
Este domingo 28, en el solar de Artigas, en Asunción del Paraguay, se efectuó el acto por el centenario de la institución. Participaron, además de las autoridades, alumnos, docentes, exalumnos y delegaciones que se trasladaron desde Uruguay. En la oportunidad, el Solar de Artigas fue declarado como Patrimonio Cultural del Mercosur.
Asimismo, el Gobierno uruguayo entregó unas 20 computadoras de Ceibal. También se realizó un reconocimiento a dos funcionarias que cumplieron 40 años de trabajo en la escuela. Uno de los galardones estuvo dirigido a un grupo de jinetes que realizaron una travesía a caballo desde Uruguay, similar a la realizada por Artigas, que les supuso un mes de viaje y unos 1.200 kilómetros recorridos. Los aparceros hicieron llegar mensajes de niños uruguayos a sus pares paraguayos.
El acto incluyó actuaciones artísticas y cerró con el descubrimiento de una placa recordatoria del evento. IR A PORTADA