El mandatario recorrió las instalaciones de la Casa Ronald McDonald ubicada dentro del Centro Hospitalario Pereira Rossell (CHPR) y conoció la atención que la entidad brinda a niños y familiares que reciben tratamiento en dicho nosocomio. Estuvo acompañado por el subsecretario de Salud Pública, José Luis Satdjian; el director del CHPR, Ricardo Ayestarán, y el titular del Hospital Pediátrico, Álvaro Galiana.
Estuvieron presentes, asimismo, la directora del Hospital de la Mujer, Risel Suárez, y autoridades de la asociación Casa Ronald McDonald, encabezadas por la directora de la organización, Sandra Marcos. Durante la recorrida, Lacalle Pou dialogó con padres de niños que reciben tratamiento, quienes le relataron el apoyo y la ayuda con que cuentan desde la institución.La Casa, que el próximo año cumplirá una década de servicio, dispone de 28 plazas y acoge a diario a más de medio centenar de personas que concurren para descansar, realizar alguna colación o higienizarse durante la internación o estudios médicos de sus niños. Además, acuden madres que reciben asistencia médica en el Hospital de la Mujer del CHPR. En su mayoría, se trata de padres y niños residentes en el interior del país, pero también de aquellos padres cuyos niños requieren atención médica y viven en la capital o zonas cercanas.
La institución dispone de un espacio en el quinto piso del nosocomio, donde los niños que permanecen internados concurren, previa autorización médica, a talleres de escritura, lectura, robótica, música, manualidades, plástica y cocina, además de sesiones de cine, entre otras actividades. Durante el año 2023 unos 4.390 niños participaron de las diferentes propuestas lúdicas.
Satdjian explicó que se trata de un lugar emblemático dentro del CHPR para aquellas familias que deben atravesar momentos de incertidumbre, en el que reciben seguridad, tranquilidad y “un lugar para estar en casa”, como relataron quienes hacen uso de las instalaciones. Agregó que, desde la calidez, los voluntarios brindan atención y cuidados. Destacó que el objetivo es acompañar a quienes transitan esas situaciones difíciles, tanto en Montevideo como en el hospital de Tacuarembó, donde hay una propuesta similar y por la que han pasado cientos de familias.
El jerarca explicó que la Casa Ronald McDonald se financia, en su mayoría, gracias a personas físicas que mes a mes “aportan un granito de arena” para solventar los gastos destinados a las instalaciones, la alimentación y los servicios. Añadió que también recibe fondos, mediante el sistema de donaciones especiales, de empresas que deducen parte de su renta y son reguladas por el Ministerio de Economía y Finanzas. Otra fuente de ingresos son las celebraciones del McDía Feliz, instancia que vierte todo lo recaudado por la venta de la hamburguesa Big Mac, señaló.
Marcos indicó que tanto el espacio de Montevideo como el de Tacuarembó representan “un hogar lejos del hogar” para padres y niños que deben permanecer, por razones médicas, lejos de sus casas por días, semanas o hasta un año, “todo el tiempo que necesiten”. Asimismo, subrayó que quienes pasan sus días en la Casa Ronald Mc Donald reciben “absolutamente todo para que solo se ocupen de lo que realmente importa, que es acompañar a sus niños cuando se encuentran enfermos”. IR A PORTADA