El Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) contará con seis nuevas plazas en la chacra anexa a la Unidad 23, allí albergará a mujeres privadas de libertad, con mejoras en las condiciones de reclusión. “Hasta hoy solamente los hombres podían tener ese privilegio de venir a trabajar en la chacra”, dijo el director del INR, Luis Mendoza. En el centro ubicado en Treinta y Tres hay 136 internos, de los que 17 son mujeres.
“No solamente el alojamiento cambia, sino también las actividades”, detalló Mendoza, a Comunicación Presidencial, este viernes 6, en la inauguración del espacio, acompañado por la directora de la unidad n.° 23 del INR, Gabriela Ferreiro.El jerarca resaltó la relevancia de trabajar en la rehabilitación de las personas privadas de libertad por medio de actividades vinculadas al estudio, trabajo, recreación, deporte y cultura. “La vida de estas mujeres va a cambiar”, reflexionó, respecto a las tareas que realizarán.
En la chacra, que funciona como anexo a la unidad, los internos realizan cría de animales, invernáculos y producción de verduras. “Significa mucho para la rehabilitación y para la igualdad”, enfatizó.
Además, el INR prevé trasladar la referida unidad a la localidad de Villa Sara. El edificio actual del centro de reclusión mantiene un formato antiguo, al encontrarse lindero a la jefatura departamental, en el casco urbano, explicó Mendoza. De esta forma, los internos podrán contar con espacios adecuados para trabajar, estudiar, desarrollar habilidades y aprender oficios.
“Somos unos convencidos de que para trabajar la rehabilitación hay que sacar las cárceles de las ciudades”, señaló. IR A PORTADA