La Intendencia de Canelones invertirá $ 4.000.000 en el tratamiento de 1.000 palmeras para combatir al picudo rojo, una plaga que amenaza tanto a especies nativas como exóticas. Con técnicas de endoterapia y ducha apical, se busca frenar el avance del insecto, preservar el patrimonio natural y mitigar el impacto ambiental, destacando la necesidad de repetir los tratamientos anualmente.
El picudo rojo es un curculiónido originario del sudeste asiático que afecta a las palmeras mediante larvas que perforan galerías en el tronco, lo que provoca el debilitamiento y eventual muerte del ejemplar. Los síntomas de infestación incluyen amarillamiento, marchitez y caída de hojas, además de la presencia de orificios y exudaciones rojizas en el tronco.El Director de Espacios Públicos de la Intendencia de Canelones, Martín Barindelli, explicó que el tratamiento –centralizado mediante licitación– abarcará a 1.000 palmeras en todo el departamento e incluirá técnicas de endoterapia (inyección de productos) y aplicación sobre las hojas apicales con un costo total de $ 4.000.000, lo que equivale a $ 4.000 por palmera. Es importante destacar que no es una solución definitiva, sino un procedimiento que debe repetirse cada año, con dos dosis anuales para proteger las palmeras.
Barindelli destacó que el combate al picudo rojo, detectado por primera vez en Canelones en la Quinta de Capurro de Santa Lucía, se viene desarrollando desde hace dos años. En un inicio, los municipios contrataban empresas de manera independiente para realizar estos tratamientos. Sin embargo, la Intendencia decidió centralizar el esfuerzo a través de una licitación, lo que permite coordinar acciones y optimizar los recursos destinados a enfrentar esta plaga.
Aunque inicialmente se detectó el ataque en Phoenix canariensis (palmera canaria), la plaga también afecta a especies nativas como Butia odorata (butiá) y otras exóticas como Washingtonia robusta. "Esto refuerza la importancia del esfuerzo conjunto de la Dirección de Espacios Públicos, la Dirección General de Gestión Ambiental y la Dirección de Patrimonio para preservar estas especies. La tarea es ardua pero fundamental para proteger el patrimonio natural del departamento", concluyó Barindelli.
Contexto biológico, control y tratamiento
El ciclo de vida del picudo rojo comienza con la deposición de huevos en la corona de las palmeras. Las larvas, que pueden alcanzar hasta cinco cm de longitud, perforan el tronco creando galerías que dañan el sistema vascular de la planta, debilitándola progresivamente. Para controlar esta plaga, el tratamiento debe implementarse de forma preventiva o tan pronto como se detecten los primeros síntomas.
La ingeniera agrónoma Carola Negrone señaló que el tratamiento implementado incluye la endoterapia, una técnica que permite inyectar soluciones directamente en el tronco de las palmeras. Este método se complementa con riegos aplicados en la corona, asegurando una protección efectiva que se extiende por un año, siendo medidas esenciales en la lucha contra el picudo rojo.
Según indicó, en el pliego de licitación se estableció que la endoterapia debía aplicarse a una altura específica de 1,20 metros desde la corona de las palmeras, tras comprobarse una efectividad del 100 % en evaluaciones previas realizadas con esta técnica.
Negrone destacó que las palmeras seleccionadas para el tratamiento fueron determinadas por los municipios, priorizando aquellas ubicadas en plazas principales y zonas de mayor relevancia en caminos y ciudades. Este criterio busca proteger ejemplares emblemáticos y de alto impacto visual, preservando el paisaje característico de las localidades afectadas.
Las autoridades de Canelones enfatizaron que estas acciones son parte de un esfuerzo integral para proteger el patrimonio natural del departamento y aseguraron que los tratamientos serán monitoreados para evaluar su efectividad en los próximos meses.