La Intendencia de Canelones presentó avances en la gestión de riesgo de inundaciones en Santa Lucía, en coordinación con diversos actores sociales e institucionales. La iniciativa permitió instalar un sistema de reglas limnimétricas que complementa la información existente, facilitando el monitoreo del río y el acceso libre a datos importantes para la toma de decisiones ante eventos climáticos adversos.
La presentación tuvo lugar en la sala de reuniones de la Casa de la Cultura y Museo José Enrique Rodó de Santa Lucía y contó con la participación de representantes de la Intendencia de Canelones, el Municipio Santa Lucía, la Facultad de Ciencias y el Centro Universitario Regional del Este (CURE) de la Universidad de la República, además del Sistema Nacional de Emergencias (SINAE) y el colectivo Vecinos en Red, quienes impulsaron la iniciativa.El sistema de reglas, que incluye 40 unidades instaladas en puntos estratégicos de la ciudad, busca mejorar la capacidad de monitoreo de las crecidas del río, complementando los sensores previamente instalados por la Intendencia y el CURE. Además, se elaboró material audiovisual educativo para informar e involucrar a la comunidad en la gestión de riesgos.
El Director General de Gestión Ambiental de la Intendencia, Leonardo Herou, destacó que esta iniciativa es una respuesta a los eventos de inundaciones ocurridos en 2019 y 2024 y que la meta es fortalecer el sistema de alerta temprana. Explicó que cuando se evaluó la última inundación, los vecinos y vecinas plantearon la necesidad de contar con un sistema de reglas que proporcionara más datos. Tras varias instancias de articulación, se logró diseñar e instalar 40 reglas, además de establecer un protocolo de uso y un video informativo para la comunidad.
Por su parte, el Alcalde de Santa Lucía, Leonardo Mollo, subrayó que la colocación de estas reglas forma parte del compromiso asumido con el Comité de Emergencia y la comunidad. Detalló que en la presentación se informó dónde están ubicadas, cómo funcionan y qué variables deben considerarse para su lectura. A su vez, afirmó que este es un paso más dentro del plan de gestión de riesgo que se viene desarrollando desde el inicio del período de gobierno.
Protocolo, monitoreo y ubicación estratégica de las reglas limnimétricas
El sistema se diseñó considerando 22 puntos estratégicos de la ciudad, en función de la topografía y el comportamiento de las crecidas del río Santa Lucía. Se priorizaron áreas críticas como el puente sobre la Ruta 11, la Cañada de los Negros y el barrio El Caimán, zonas vulnerables a desbordes. También se incluyó la costanera de la ciudad, donde se supervisará el ingreso del agua a través de alcantarillas y canales. A pedido de los vecinos y vecinas se sumaron cinco reglas más a las previstas, colocándose un total de 27 nuevas reglas.
Lucía Elun, profesora de Geografía del Instituto de Ecología y Ciencias Ambientales de la Facultad de Ciencias, explicó que el sistema integra 40 reglas, sumándose a las 13 preexistentes, y puntualizó que se propuso un protocolo de lectura que permite un monitoreo ordenado y secuencial a partir de siete puntos de referencia, interconectados con los sensores ya instalados. Esto posibilita un seguimiento más preciso del avance del agua durante las inundaciones en coordinación con los vecinos y vecinas de la zona.
Por su parte, el Teniente Coronel González, de la Dirección Nacional de Emergencias del SINAE, destacó la importancia del involucramiento ciudadano en este proceso. Consideró que esta herramienta permitirá registrar y evaluar la evolución de las inundaciones, facilitando una mejor gestión del riesgo y la toma de decisiones, y fortalecerá la concientización sobre la problemática de las crecidas, que afectan recurrentemente a la comunidad.
Finalmente, Silvio Villanueva, representante del colectivo Vecinos en Red, valoró el trabajo conjunto con la Intendencia y el municipio. "Nos sentimos respaldados y queremos contribuir con soluciones. En situaciones de creciente, la comunidad se organiza para compartir información y ayudar en la toma de decisiones. Este sistema de reglas es un logro colectivo que mejorará nuestra capacidad de respuesta ante futuras inundaciones", concluyó.
Este esfuerzo conjunto refuerza la importancia de la cooperación entre la comunidad, la academia y las instituciones en la gestión de riesgos. La implementación del sistema de reglas limnimétricas no solo mejora la capacidad de monitoreo, sino que también fortalece la preparación ante eventos climáticos, consolidando un modelo de trabajo que prioriza la prevención y la respuesta coordinada ante futuras inundaciones. IR A PORTADA
