Un creciente número de motocicletas incautadas por el personal de Tránsito de la Intendencia de Durazno y almacenadas en predio lindero a la Seccional 14 de Policía y en instalaciones municipales de Sarandí del Yí ha generado preocupación entre autoridades locales, que plantean la posibilidad de su remate o disposición definitiva ante el deterioro por abandono.
El edil nacionalista Andrés Pereyra llevó el tema a la Junta Departamental este jueves, luego de recibir inquietudes del alcalde Óscar Reyes y varios Concejales de esa ciudad. Según detalló, las motos se encuentran acumuladas en condiciones precarias, en medio de maleza, sin un control claro del volumen ni del estado general de los vehículos."Consideramos que se puede aplicar, como se ha hecho en algunas oportunidades, una subasta o incluso proceder a su reducción definitiva", expresó Pereyra. En ese sentido, solicitó que la Comisión de Tránsito de la Junta se traslade a Sarandí del Yí para realizar un relevamiento, consultar al Alcalde y evaluar alternativas viables en cumplimiento con la Ley 18.791 y el decreto departamental N.º 2116 del año 2009.
El planteo apunta a resolver una situación que, según el curul, podría agravarse si no se adoptan medidas prontas: “Estas motos no solo se deterioran con el paso del tiempo, sino que también representan un problema logístico y ambiental”. La Comisión de Tránsito deberá ahora definir si toma cartas en el asunto e impulsa una salida institucional a la acumulación de vehículos incautados en la ciudad.
